queremos facilitar el aprendizaje, corregir y prevenir deficiencias.
mediante la observación de su entorno y su adaptación a él.
Estimulación motora

Cada niño lleva su ritmo de aprendizaje y debemos respetarlo, pero podemos ayudarle a desarrollar ciertas habilidades como:
Fortalecer el tronco, mantener el equilibrio, fortalecer el cuello, ejercicios de rodado, fortalecer la espalda, aprender a sentarse, aprender a caminar, reforzar el gateo, etc…


Estimulación motora

Cada niño lleva su ritmo de aprendizaje y debemos respetarlo, pero podemos ayudarle a desarrollar ciertas habilidades como:
Fortalecer el tronco, mantener el equilibrio, fortalecer el cuello, ejercicios de rodado, fortalecer la espalda, aprender a sentarse, aprender a caminar, reforzar el gateo, etc…

Estimulación sensorial

La estimulación sensorial es lo que denominamos primera forma de contactar y conocer el entorno: los estímulos que llegan al cerebro lo activan, el cerebro procesa la información y elabora respuestas que irán generando conductas y comportamientos, simples y complejos, en respuesta al entorno que va construyendo.
La estimulación temprana de los niños es más eficaz porque su cerebro tiene mayor plasticidad; esto hace que se establezcan conexiones entre las neuronas con más facilidad, rapidez y eficacia.
Estimulación Cognitiva

La estimulación cognitiva es el conjunto de actividades que tienen como objetivo fundamental el mejorar el rendimiento y la eficacia de las distintas capacidades mentales (aprendizaje, razonamiento, atención, memoria, resolución de problemas, toma de decisiones, procesamiento del lenguaje, etc.).
Esto se consigue entrenando dichas capacidades y los componentes que las integran, de forma adecuada y sistemática, para transformarlas en una habilidad, un hábito y/o una destreza.


Estimulación Cognitiva

La estimulación cognitiva es el conjunto de actividades que tienen como objetivo fundamental el mejorar el rendimiento y la eficacia de las distintas capacidades mentales (aprendizaje, razonamiento, atención, memoria, resolución de problemas, toma de decisiones, procesamiento del lenguaje, etc.).
Esto se consigue entrenando dichas capacidades y los componentes que las integran, de forma adecuada y sistemática, para transformarlas en una habilidad, un hábito y/o una destreza.