TDA

El trastorno por Déficit de Atención (TDA) es un trastorno crónico. La mayoría de los que presentan TDA en la infancia mantienen síntomas hasta la edad adulta.
Afecta negativamente al niño en al menos dos ambientes de su vida: colegio, amigos, casa…
Los síntomas deben durar al menos 6 meses, y que no sean debidos a otro problema: separación de los padres, fallecimiento de algún familiar, ni debido a un problema médico, o medicación. Su inteligencia es normal o normal alta. Deben cumplir al menos 6 síntomas, para considerar que presentan TDA.
Los niños con TDAH del tipo inatento (denominados TDA), no tienen problemas de hiperactividad o impulsividad, sólo presentan los síntomas de inatención: cometen errores por no prestar atención a los detalles, no mantienen la atención en tareas largas, parece que no escuchan, tienen dificultades en completar órdenes complejas (dejan las cosas a medias), evitan las acciones que requieren esfuerzo mental (dejan siempre los deberes para el final), son desorganizados, pierden cosas, son olvidadizos y se distraen con facilidad.
Pasan desapercibidos en clase porque no molestan. Es más frecuente en niñas.
Los problemas suelen aparecer en cursos superiores de primaria, porque al no molestar y sus notas ser buenas, los cursos inferiores los pasan sin dificultades, hasta que los contenidos son más complicados y tienen que ser más autónomos en clase, y es cuando aparecen los problemas.


TDA

El trastorno por Déficit de Atención (TDA) es un trastorno crónico. La mayoría de los que presentan TDA en la infancia mantienen síntomas hasta la edad adulta.
Afecta negativamente al niño en al menos dos ambientes de su vida: colegio, amigos, casa…
Los síntomas deben durar al menos 6 meses, y que no sean debidos a otro problema: separación de los padres, fallecimiento de algún familiar, ni debido a un problema médico, o medicación. Su inteligencia es normal o normal alta. Deben cumplir al menos 6 síntomas, para considerar que presentan TDA.
Los niños con TDAH del tipo inatento (denominados TDA), no tienen problemas de hiperactividad o impulsividad, sólo presentan los síntomas de inatención: cometen errores por no prestar atención a los detalles, no mantienen la atención en tareas largas, parece que no escuchan, tienen dificultades en completar órdenes complejas (dejan las cosas a medias), evitan las acciones que requieren esfuerzo mental (dejan siempre los deberes para el final), son desorganizados, pierden cosas, son olvidadizos y se distraen con facilidad.
Pasan desapercibidos en clase porque no molestan. Es más frecuente en niñas.
Los problemas suelen aparecer en cursos superiores de primaria, porque al no molestar y sus notas ser buenas, los cursos inferiores los pasan sin dificultades, hasta que los contenidos son más complicados y tienen que ser más autónomos en clase, y es cuando aparecen los problemas.
Síntomas de esta etapa:
Presentan dificultades en realizar una misma cosa durante mucho tiempo, se aburren enseguida tras unos minutos haciendo la tarea, tienen que esforzarse mucho para terminar actividades rutinarias, se despistan con cualquier cosa y empiezan a pensar en otras cosas distintas a lo que están haciendo, les cuesta mantenerse organizados, hay que repetirles muchas veces las cosas para que las haga, cualquier estímulo o situación que se cruce por su camino les hace olvidarse de lo que estaban haciendo, y lo dejan a medias para seguir con lo nuevo, «están en todo y no están en nada», nunca alcanzan el objetivo final.