Cuando vemos que nuestro hijo no habla bien o, si lo hace, lo hace al mínimo, nos preocupamos ¿Cuándo acudir a un especialista?
No habla bien, tartamudea, omite letras o sustituye unas grafías por otras… Estos son algunos de los primeros avisos de que un niño puede padecer un trastorno del lenguaje. Pero, tranquilidad, porque la mayoría de estos problemas pueden ser corregidos por el logopeda
Los niños, desde sus primeros balbuceos hasta que se expresan fluidamente, están todo el tiempo familiarizándose y desarrollando la que será su herramienta más valiosa de comunicación: el lenguaje. Este va evolucionando desde el lenguaje meramente expresivo hasta el comprensivo. No obstante, esta progresión no siempre toma el camino que esperamos. Cuando vemos que nuestro hijo no habla bien o, si lo hace, lo hace al mínimo, omite sonidos, confunde las letras o las sustituye o posee un bajo rendimiento en el colegio, nos preocupamos, como es natural. Pensamos que algo no anda bien. Y es que, a veces, en esta parte del proceso de la adquisición del lenguaje pueden presentarse algunos trastornos que, afortunadamente, la mayoría de las veces tienen solución…